miércoles, 11 de febrero de 2009

Buceo



Las sensaciones de la gente suelen ser encontradas cuando se sitúan entre lo sobrecogedor y lo doloroso. Difícil que alguien opine que es bonito un Cementerio, pero seguramente lo hace pensando en el dolor que conlleva concurrir allí, a despedir a un querido o a homenajear su memoria de vez en cuando con alguna flor.

Sin embargo, muchas veces ofrece un paisaje fuera de lo cotidiano, de serenidad, reflexión y respeto. Hoy tuve que ir al Buceo, para reducir los restos de seres entrañables. La distancia en el tiempo desde que nos dejaron le da a la visita un perfil diferente. Hay respeto y ternura por los recuerdos. Y a su vez permite tomarse el tiempo para mirar alrededor y ver que el paisaje es sobrio, elegante, y hasta conjuga como en el caso la soledad de la calle interior con la vida en la ciudad, como se ve en el fondo.

7 comentarios:

Federico dijo...

Ponele el gadget para seguimiento asi no me pierdo tus actualizaciones!!!!
Ya estaremos haciendo sesion de fotos por ahi ;)

Un calido abrazo.

RALLCH dijo...

Y al final del camino, comienza la vida nuevamente...el salto.

"Somos como un caballo sin memoria,
somos como un caballo
que, no se acuerda ya
de la última valla que ha saltado.
Venimos corriendo y corriendo
por una larga pista de siglos y de obstáculos.
De vez en vez, la muerte.
... ¡el salto!
y nadie sabe cuántas
veces hemos saltado
para llegar aquí, ni cuántas saltaremos todavía
para llegar a Dios que está sentado
al final de la carrera...
esperándonos.
Lloramos y corremos,
caemos y giramos,
vamos de tumbo en tumba
dando brincos y vueltas entre pañales y sudarios".
León Felipe

El Hormiguero dijo...

Gracias Fede por la orientación. ¿Así está bien?
Rallch: ¡¡¡Qué fenómeno León Felipe!!!

Anónimo dijo...

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos
esta muerte que nos acompaña
desde el alba a la noche, insomne,
sorda, como un viejo remordimiento
o un absurdo defecto. Tus ojos
serán una palabra inútil,
un grito callado, un silencio.
Así los ves cada mañana
cuando sola te inclinas
ante el espejo. Oh, amada esperanza,
aquel día sabremos, también,
que eres la vida y eres la nada.

Para todos tiene la muerte una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como dejar un vicio,
como ver en el espejo
asomar un rostro muerto,
como escuchar un labio ya cerrado.
Mudos, descenderemos al abismo.

Cesar Pavese
este poema me hace pensar, siempre, cuales serán los últimos ojos que veré o en cuales pensaré...por ahora creo que los de mi hijo

Como diría Susanita. "una madre es una madre":) :) :)

Me gusta este blog, cada foto me trae recuerdos muy lindos.

saludos a todos

Anónimo dijo...

Erré:
después del nombre del autor debería haber otro espacio y una mayúscula.

Federico dijo...

Como decimos por alla: Impecable!
Ya estoy como seguidor. Gracias!!

Isabel Vignone dijo...

En cuanto leí tu entrada me acordé de estas visitas guiadas que va a hacer la IMM empezando por el Cementerio Central, tan lleno de historias patricias, héroes antiguos, escultores famosos, tesoros escondidos, túneles secretos y demás...
http://www.espectador.com/1v4_contenido.php?id=138493&sts=1

La verdad que parece interesante, lástima la palabra "necroturismo" que suena a perversa desviación sexual, no tenían otra?